La gripe de 1918 en Cabárceno
Cabárceno es una localidad del municipio cántabro de Penagos. En este artículo nos hacemos eco de la situación que padeció ante la epidemia de gripe de 1918 según la denuncia que los socialistas formularon e hicieron pública en las páginas de El Socialista. Aporta datos sobre la situación en la que vivían las clases más humildes en las localidades rurales de aquella Cantabria, y que no ayudaban, precisamente a evitar la extensión de esta pandemia.
Según la crónica publicada la gripe estaba asolando la localidad, diezmando el vecindario y siendo especialmente virulenta con los más humildes. Y eso era por las condiciones en las que vivían, por el hacinamiento, ya que, en las casas, calificadas por el corresponsal del periódico obrero, como pocilgas habitan 10 o 12 familias, y con huéspedes, una “repugnante promiscuidad”.
El corresponsal denunciaba la actitud del alcalde de Penagos, el Ayuntamiento al que estaba agregado Cabárceno, como hemos indicado. Al parecer, los trabajadores, al iniciarse la epidemia habían solicitado que se preocupase del estado sanitario del pueblo, y enviase médicos y medicinas, ya que se carecía de ambos.
El Grupo Femenino Socialista había acudido al gobernador civil para protestar por el abandono en que el alcalde tenía a Cabárceno. Ante esta denuncia, esta autoridad envió un médico, pero fue rechazado por el alcalde porque había considerado que no eran necesarios sus servicios. Pero en esos momentos estaba gravemente enferma una niña, tardando diez días en poder, por fin, recibir la visita facultativa del médico titular, desbordado por el alto número de enfermos en todos los pueblos dependientes del Ayuntamiento de Penagos.
El corresponsal interpretaba que las autoridades locales no querían que llegasen médicos para combatir la gripe sino dinero para luego poder repartírselas.
Hemos consultado el número 3390 de El Socialista de 8 de noviembre de 1918, como fuente.