La celebración socialista madrileña por el avance electoral del SPD (1903)
La dimensión internacional del socialismo español es un asunto que necesita un estudio monográfico porque es muy importante conocer el grado de influencia de la realidad socialista europea, especialmente, en las distintas estrategias emprendidas por PSOE, y aunque conocemos ya claramente algunos aspectos de esta influencia, queda por conocerla con más profundidad y en todos los casos. El PSOE, además, se involucró en los acontecimientos internacionales en la medida de sus posibilidades. En El Obrero hemos dedicado mucha atención a estos aspectos, y seguiremos con ello.
A primeros de julio de 1903 la Agrupación Socialista Madrileña organizó un acto para celebrar el avance electoral del SPD en las recientes elecciones legislativas. Como sabemos, la Socialdemocracia había avanzado considerablemente en relación con 1898, con 25 escaños más, sacando un total de 81 diputados para el Reichstag. El Zentrum católico había alcanzado 100, y después iba el SPD con sus 81. El avance en votos había sido espectacular.
El acto fue presidido por Maeso, por indisposición de Largo Caballero. El Orfeón Socialista entonó “Los Hijos del Trabajo”. Después hablaron Cortés, Mora y Pablo Iglesias, que explicaron el triunfo electoral socialista en Alemania, insistiendo en que no se había pactado con ningún partido burgués, luchando electoralmente solos, que, como sabemos, era la estrategia debatida en el socialismo internacional, y sobre la que el español insistía de forma más evidente aún, dado su acusado obrerismo y su enfrentamiento con los republicanos.
Además, el éxito era más meritorio, ya que el día de las elecciones había sido laborable, y a muchos trabajadores les costó perder la ocupación para poder ejercitar su derecho electoral.
Los oradores llamaron la atención sobre los esfuerzos que representaba un triunfo tan grande, además del mérito que tenían unos hombres que no se entregaban al entusiasmo, sino que pensaban en seguir avanzando para ganar más voluntades y conciencias. También explicaron los trabajos y dificultades sufridas por los socialistas alemanes, sin olvidar el hecho de que las organizaciones de resistencia (sindicatos) habían reconocido la necesidad de la lucha política y, por lo tanto, habían recomendado desde sus periódicos las candidaturas socialistas, aportando, por lo demás, cuarenta mil marcos de sus cajas de resistencia con destino a los gastos electorales. Esta alusión tenía, a nuestro juicio, una clara lectura española, en alusión implícita a los anarquistas.
Las cuatro condiciones que habían posibilitado el éxito electoral habían sido las siguientes: “capacidad, unión, disciplina y voluntad” El acto terminó con “La Internacional” y “La Marsellesa de la Paz”, y con vivas al SPD y al socialismo internacional.
Hemos consultado el número 905 de El Socialista del diez de julio de 1903.