Ante la existencia de un número considerable de palacios abandonados en Madrid, concretamente en el Barrio de Salamanca, desde que se instauró la Segunda República, se planteó la necesidad de la expropiación desde las páginas de El Socialista, justificándola en una interpretación del precepto constitucional sobre la dimensión social de la propiedad. No se hizo nada, pero merece la pena que estudiemos el planteamiento porque, en algunos aspectos, recuerda a la cuestión de los bienes de los émigrés en Revolución Francesa, y aporta información sobre el concepto de propiedad en la época desde la perspectiva socialista.